Las noches de fiesta están a punto de ser mucho más seguras. El Congreso de Yucatán ha dado un paso firme para garantizar la seguridad de sus habitantes con la aprobación de reformas al Código Penal, que imponen hasta 7 años de cárcel a quienes sean hallados culpables de sumisión química, conocido popularmente como “canasteo”.
Esta medida busca poner freno a un delito que ha causado estragos no solo en el estado, sino en todo el país y más allá.
El diputado Víctor Hugo Lozano Poveda, quien defendió fervientemente el dictamen, compartió que el proceso de creación de esta iniciativa fue inclusivo y colaborativo, involucrando a diversos sectores de la sociedad.
“Defender la integridad humada es una de las prioridades de esta Legislatura, por eso le concederemos a las autoridades encargadas de procuración e impartición de justicia los elementos necesarios para perseguir y castigar a quienes incurran en dichas conductas criminales”, aseguró.
La modificación legislativa surge como respuesta a los numerosos reportes de personas drogadas en bares y otros espacios públicos con sustancias que les hacen perder la memoria o el conocimiento, facilitando robos, abusos sexuales y hasta secuestros.
“De esta manera, podemos prevenir un aumento en los casos de delitos cometidos contra personas que se encuentran inconscientes, y también enviar un mensaje claro a quienes piensan en cometer estos delitos”, dijo Lozano Poveda.
De esta manera Yucatán está tomando medidas severas para proteger a sus ciudadanos y garantizar que los delincuentes enfrenten la justicia.