¡Esta historia parece sacada de una película, pero sucede aquí y ahora! Imagina una escuela donde el director, con ínfulas de dictador, tiene a todos bajo su pulgar. Los alumnos, asustados, sufren las consecuencias de sus decisiones.
Nuestros aliados son el presidente de la sociedad de alumnos, electo de manera democrática y un prefecto, que trataba de ser justo.
Un día, sucedió un giro inesperado. El director, sin miramientos, cambió al prefecto por su hermano y montó un circo para elegir al nuevo presidente de la sociedad de alumnos, ¡su propio hijo! Con amenazas y manipulaciones, intentó imponer su voluntad, ignorando las leyes y las instituciones que debían protegernos.
¿El resultado? La escuela se convirtió en un caos, sumida en la mediocridad. El desastre era evidente y la escuela tuvo que cerrar.
¿Y si te digo que esta historia se parece peligrosamente a lo que podría suceder si un solo partido o persona obtiene todo el poder en México?
Es más o menos lo que sucede en el Gobierno cuando un solo partido político tiene el control total. En México, cuando el Presidente y la mayoría de los legisladores en la Cámara de Diputados y el Senado son del mismo partido, a veces hacen lo que se llama “levantar la mano sistemáticamente”. Esto significa que simplemente votan a favor de todo lo que el presidente quiere.
El problema con esto es que no están analizando las decisiones ni pensando en lo que es mejor para el país. Por eso, es importante tener una mezcla de diferentes partidos políticos, para que haya equilibrio y se discutan las decisiones de manera justa.
Lo más aterrador es que esta historia podría repetirse a escala nacional. Imagina un país donde desaparecen instituciones clave como el INE, el Instituto de Acceso a la Información Pública y la Transparencia, donde se eliminan los órganos autónomos.
¿Qué tal si desde la Cámara de Diputados y el Senado se aprueban leyes que atentan contra tu privacidad y tu propiedad privada? ¿Te imaginas vivir en un lugar donde las investigaciones se autorizan solo porque al presidente no le agradas? Es como perder todos los derechos por los que generaciones enteras han luchado con sudor y sangre.
Este 2 de junio, tenemos la oportunidad de evitar que México cierre. No dejemos que el poder se concentre en manos un solo partido. ¡Es hora de abrir los ojos y tomar acción!
